Esta frase la suelo escuchar en mi consulta continuamente. Y sí, es cierto, puede ser que tengas, por herencia, un metabolismo bajo.
Pero eso no significa que estés condenado a vivir con él y conformarte a tener sobrepeso y las molestias que eso conlleva.
Es posible modificar nuestro metabolismo y hacer que trabaje con nosotros y no en nuestra contra.
Acelerando nuestro metabolismo bajaremos de peso de una manera más rápida que hasta ahora y de manera sana, natural y con menos esfuerzo.
Te explico cómo:
1- Desayuna algo nutritivo todos los días
Nuestro desayuno debe incluir hidratos de carbono, proteínas (se puede incluir algún lácteo y algo de fruta.
¿Te cuesta comer a primera hora de la mañana?
No pasa nada, puedes tomar un café y al cabo de una hora desayunar correctamente
¿Difícil juntar todos estos nutrientes en un solo desayuno?
Te ayudo:
- FRUTA: Mejor si es ácida como la naranja, mandarina, kiwi o piña. También puedes tomarla en zumo, pero pon atención en que sea sin azúcares añadidos y con la pulpa.
- HIDRATOS DE CARBONO: Puedes utilizar cereales integrales o muesli, un par de tostadas de pan integral, un mini bocadillo o 4 galletas integrales
- PROTEÍNAS: Podemos tomar nuestras hidratos de carbono junto con queso fresco, queso feta, yogur, lonchas de jamón dulce, pavo, atún, tortilla...
Entendido, no tienes tiempo ni ganas de masticar (a mucha gente le pasa que les cuesta pegar bocado a según que horas de la mañana)
También tengo la solución.
Batido nutritivo:
Ponemos en la batidora un yogur, una pieza de fruta y cereales para el desayuno o las 4 galletas integrales. Si nos queda muy espeso sólo le tenemos que añadir un poco de leche vegetal. Para endulzar podemos añadir una cucharadita de miel.
Además, si queremos añadir un extra de energía podemos añadir al batido polen y levadura de cerveza.
2- Agrega té verde a tu dieta
El té verde ayuda a acelerar el metabolismo, facilita la oxidación de la grasa y la termogénesis, además de tener propiedades antioxidantes.
La cantidad ideal son 5 tazas de té verde al día, con lo que se incrementa considerablemente la energía del cuerpo con apenas 90 calorías.
Acostúmbrate a tomar una taza de té después de cada comida, como postres, y como acompañamiento del tentempié de media mañana y media tarde, así como en el desayuno.
3- Come alimentos ricos en omega 3
El pescado azul como el salmón, el atún, la sardina, aceleran el metabolismo además de regular los niveles de azúcar en sangre, y ayudan a reducir la resistencia a la leptina, una hormona que facilita la pérdida de peso.
En caso de que no te guste comer pescado puedes agregar un complemento diario de omega 3 que contenga unos 2.000 mg o algunos frutos secos a media mañana para obtener los mismos beneficios.
4- No intentes eliminar tus calorías de tu dieta
Tenemos la idea equivocadisima de que quienes eliminan más calorías de su alimentación, logran bajar de peso más fácilmente.
Sí, eso puede ser cierto al principio, pero después, nuestro cuerpo se da cuenta de que le estamos dando menos calorías y comienza a incrementar sus reservas de energía acumulando grasa.
Por eso mismo, comer más acelera tu metabolismo siempre y cuando elijas alimentos sanos y que te aporten nutrientes.
También es importantes que no pases largos periodos de ayuno. Lo ideal sería comer 6 veces al día, cada 3 horas (unas 300 calorías cada vez).
5- Agrega distintas intensidades al ejercicio
Lo que más recomiendo es andar.
Andar a un ritmo que notes que te falta algo el aliento. Que si quisieras hablar te costara. Y en ese ritmo, añadas algunos intervalos de sólo 30 segundos de más intensidad. Trota contando hasta 30 y luego vuelve a andar al mismo ritmo que llevabas antes.
Es un cambio muy ligero, pero sólo eso hará que tu cuerpo consuma más energía.
Estos intervalos los puedes añadir a cualquier deporte que realices
6- Toma un descanso después de hacer ejercicio
Aunque el ejercicio los ayuda a acelerar el metabolismo, un elemento clave para ello es el descanso adecuado que le permite a nuestro cuerpo regresar a su estado de calma.
7- Evita las grasas trans
Reducen la habilidad natural de tu cuerpo para quemar grasa. Esto se debe a que alteran nuestras células y reducen nuestro metabolismo.
También generan resistencia a la insulina, con lo que nos sentimos con ganas de tomar algo dulce justo después de haber comido
Encontramos grasas trans se encuentran en alimentos industrializados como la margarina, productos de pastelería, alimentos procesados y fritos.
8- Incrementa la ingesta de proteína
Nuestro cuerpo tarda más tiempo en digerir los alimentos ricos en proteína que los ricos en grasa o carbohidratos. Esto significa que cuando comes proteína te sientes satisfecho por más tiempo, mientras que tu metabolismo sigue trabajando y quemando grasa para lograrlo. Esto se traduce en un aceleramiento considerable de tu metabolismo y en una reducción de hambre. Además, se ha demostrado que comer proteína te permite ganar músculo en lugar de grasa.
La proteína la encontramos en los alimentos de procedencia animal, en legumbres, frutos secos, y champiñones
9- Vitaminízate
Las vitaminas o minerales no adelgazan, pero son necesarias para obtener energía a partir de los alimentos y algunas son imprescindibles para el metabolismo energético.
Si quieres quemar debes cuidar las dosis de vitaminas del grupo B, cromo y zinc.
Vitaminas del grupo B las encontramos en cereales integrales, y las tenemos que ingerir todos los días.
El Cromo también lo encontramos en cereales integrales, semillas y frutos secos.
El Zinc lo encontramos en frutos secos, legumbres, frutas y verduras, en el pescado, el huevo, el queso, semillas y avena
10- Toma algo de proteínas antes de irte a dormir
Para favorecer la ganancia de masa muscular no debes dejar pasar periodos de ayuno prolongados, durante la noche se pasan muchas horas sin comer. Se ha demostrado que un pequeño tentempié proteico antes de dormir evita picos de insulina y glucosa en sangre y mantiene el motor digestivo.
Antes de acostarnos podemos tomar un yogur, una tarrina de queso fresco, unas lonchitas de jamón dulce o pavo, o incluso una barrita de proteínas.
La genética marca algunas características de nuestro cuerpo, pero con algunos cambios podemos tomar el control de aquello que deseamos modificar y lograrlo.
Acelerar el metabolismo significa que este trabajará más rápido, quemará más calorías y llegaremos y nos mantendremos en nuestro peso ideal.
Al seguir estos consejos le damos la oportunidad a nuestro organismo de mantenerse sano de forma natural y autorregulada. Esto es mucho más sano que probar dietas complicadas que generan pocos resultados.
Pero eso no significa que estés condenado a vivir con él y conformarte a tener sobrepeso y las molestias que eso conlleva.
Es posible modificar nuestro metabolismo y hacer que trabaje con nosotros y no en nuestra contra.
Acelerando nuestro metabolismo bajaremos de peso de una manera más rápida que hasta ahora y de manera sana, natural y con menos esfuerzo.
Te explico cómo:
1- Desayuna algo nutritivo todos los días
Nuestro desayuno debe incluir hidratos de carbono, proteínas (se puede incluir algún lácteo y algo de fruta.
¿Te cuesta comer a primera hora de la mañana?
No pasa nada, puedes tomar un café y al cabo de una hora desayunar correctamente
¿Difícil juntar todos estos nutrientes en un solo desayuno?
Te ayudo:
- FRUTA: Mejor si es ácida como la naranja, mandarina, kiwi o piña. También puedes tomarla en zumo, pero pon atención en que sea sin azúcares añadidos y con la pulpa.
- HIDRATOS DE CARBONO: Puedes utilizar cereales integrales o muesli, un par de tostadas de pan integral, un mini bocadillo o 4 galletas integrales
- PROTEÍNAS: Podemos tomar nuestras hidratos de carbono junto con queso fresco, queso feta, yogur, lonchas de jamón dulce, pavo, atún, tortilla...
Entendido, no tienes tiempo ni ganas de masticar (a mucha gente le pasa que les cuesta pegar bocado a según que horas de la mañana)
También tengo la solución.
Batido nutritivo:
Ponemos en la batidora un yogur, una pieza de fruta y cereales para el desayuno o las 4 galletas integrales. Si nos queda muy espeso sólo le tenemos que añadir un poco de leche vegetal. Para endulzar podemos añadir una cucharadita de miel.
Además, si queremos añadir un extra de energía podemos añadir al batido polen y levadura de cerveza.
2- Agrega té verde a tu dieta
El té verde ayuda a acelerar el metabolismo, facilita la oxidación de la grasa y la termogénesis, además de tener propiedades antioxidantes.
La cantidad ideal son 5 tazas de té verde al día, con lo que se incrementa considerablemente la energía del cuerpo con apenas 90 calorías.
Acostúmbrate a tomar una taza de té después de cada comida, como postres, y como acompañamiento del tentempié de media mañana y media tarde, así como en el desayuno.
3- Come alimentos ricos en omega 3
El pescado azul como el salmón, el atún, la sardina, aceleran el metabolismo además de regular los niveles de azúcar en sangre, y ayudan a reducir la resistencia a la leptina, una hormona que facilita la pérdida de peso.
En caso de que no te guste comer pescado puedes agregar un complemento diario de omega 3 que contenga unos 2.000 mg o algunos frutos secos a media mañana para obtener los mismos beneficios.
4- No intentes eliminar tus calorías de tu dieta
Tenemos la idea equivocadisima de que quienes eliminan más calorías de su alimentación, logran bajar de peso más fácilmente.
Sí, eso puede ser cierto al principio, pero después, nuestro cuerpo se da cuenta de que le estamos dando menos calorías y comienza a incrementar sus reservas de energía acumulando grasa.
Por eso mismo, comer más acelera tu metabolismo siempre y cuando elijas alimentos sanos y que te aporten nutrientes.
También es importantes que no pases largos periodos de ayuno. Lo ideal sería comer 6 veces al día, cada 3 horas (unas 300 calorías cada vez).
5- Agrega distintas intensidades al ejercicio
Lo que más recomiendo es andar.
Andar a un ritmo que notes que te falta algo el aliento. Que si quisieras hablar te costara. Y en ese ritmo, añadas algunos intervalos de sólo 30 segundos de más intensidad. Trota contando hasta 30 y luego vuelve a andar al mismo ritmo que llevabas antes.
Es un cambio muy ligero, pero sólo eso hará que tu cuerpo consuma más energía.
Estos intervalos los puedes añadir a cualquier deporte que realices
6- Toma un descanso después de hacer ejercicio
Aunque el ejercicio los ayuda a acelerar el metabolismo, un elemento clave para ello es el descanso adecuado que le permite a nuestro cuerpo regresar a su estado de calma.
7- Evita las grasas trans
Reducen la habilidad natural de tu cuerpo para quemar grasa. Esto se debe a que alteran nuestras células y reducen nuestro metabolismo.
También generan resistencia a la insulina, con lo que nos sentimos con ganas de tomar algo dulce justo después de haber comido
Encontramos grasas trans se encuentran en alimentos industrializados como la margarina, productos de pastelería, alimentos procesados y fritos.
8- Incrementa la ingesta de proteína
Nuestro cuerpo tarda más tiempo en digerir los alimentos ricos en proteína que los ricos en grasa o carbohidratos. Esto significa que cuando comes proteína te sientes satisfecho por más tiempo, mientras que tu metabolismo sigue trabajando y quemando grasa para lograrlo. Esto se traduce en un aceleramiento considerable de tu metabolismo y en una reducción de hambre. Además, se ha demostrado que comer proteína te permite ganar músculo en lugar de grasa.
La proteína la encontramos en los alimentos de procedencia animal, en legumbres, frutos secos, y champiñones
9- Vitaminízate
Las vitaminas o minerales no adelgazan, pero son necesarias para obtener energía a partir de los alimentos y algunas son imprescindibles para el metabolismo energético.
Si quieres quemar debes cuidar las dosis de vitaminas del grupo B, cromo y zinc.
Vitaminas del grupo B las encontramos en cereales integrales, y las tenemos que ingerir todos los días.
El Cromo también lo encontramos en cereales integrales, semillas y frutos secos.
El Zinc lo encontramos en frutos secos, legumbres, frutas y verduras, en el pescado, el huevo, el queso, semillas y avena
10- Toma algo de proteínas antes de irte a dormir
Para favorecer la ganancia de masa muscular no debes dejar pasar periodos de ayuno prolongados, durante la noche se pasan muchas horas sin comer. Se ha demostrado que un pequeño tentempié proteico antes de dormir evita picos de insulina y glucosa en sangre y mantiene el motor digestivo.
Antes de acostarnos podemos tomar un yogur, una tarrina de queso fresco, unas lonchitas de jamón dulce o pavo, o incluso una barrita de proteínas.
La genética marca algunas características de nuestro cuerpo, pero con algunos cambios podemos tomar el control de aquello que deseamos modificar y lograrlo.
Acelerar el metabolismo significa que este trabajará más rápido, quemará más calorías y llegaremos y nos mantendremos en nuestro peso ideal.
Al seguir estos consejos le damos la oportunidad a nuestro organismo de mantenerse sano de forma natural y autorregulada. Esto es mucho más sano que probar dietas complicadas que generan pocos resultados.
No hay comentarios:
Publicar un comentario